Estas acciones se organizan en dos bloques, el primero vinculado a la revisión de los componentes de la experiencia de aprendizaje y, el segundo, al ajuste de las actividades.
El
orden que se siga en la revisión de los componentes dependerá de la necesidad y
decisión de cada docente. Cabe mencionar que la modificación de uno de ellos
implica la revisión y ajuste de los demás
Revisar la situación y determinar
si se ajusta a las necesidades, contexto e intereses de los estudiantes.
Analizar el propósito de
aprendizaje y los enfoques transversales de la propuesta base según las
necesidades reales de aprendizaje de los estudiantes.
Determinar si el reto es posible
de alcanzar por los estudiantes.
Revisar las
producciones/actuaciones de acuerdo al nivel de progreso de las competencias.
Revisar los criterios de
evaluación de acuerdo con las necesidades reales de aprendizaje.
Generar o adecuar la secuencia de actividades a partir del propósito y el reto planteado.